Guía práctica del té.
La preparación es un ritual. Muchas veces cometemos errores, en la forma de prepararlo correctamente. En Serenitea, vamos a ayudarte con estos pequeños consejos, para que puedas mejorar tu experiencia con el té y llevarlas a puntos insospechados. No debemos tener miedo a probar, distintas variedades de té. En buena parte de los casos, que te hayan resultado fuertes o amargos, es producido por una preparación incorrecta. Verás como con estos pequeños consejos, pasarán a ser brebajes deliciosos e increíbles. Atrévete a probar.
El triángulo de la buena preparación del té.
¿Por qué es tan importante la temperatura del agua?
La temperatura de infusionado, no solo va a afectar sobre las propiedades olfativas y gustativas, que nos va a transmitir nuestra infusión. Sino también sobre los efectos beneficiosos que bebida nos aporta.
Si todos los tés, los preparamos a 100ºC, temperatura de ebullición (error muy habitual), o casi, puede provocarnos sabores desagradablemente amargos. O si los hacemos a menor temperatura, puede resultarnos bajo de sabor. La forma correcta de calentar el agua, es hirviendola de forma tradicional (cazo, cazuela, tetera…etc) o un Kettle (hervidor de agua eléctrico). De esta manera nos aseguraremos de que el agua se caliente de forma uniforme.
Nunca calentarlo en el microondas. Ya, que no tenemos control sobre la temperatura, y provoca que se caliente a capas. Dejando zonas extremadamente calientes y otras frías. Esto puede provocar un excesivo calentamiento, y una disminución del oxígeno (provocando que el té, se vuelva insípido). Aumentando así, el sabor de las impurezas del agua y del material de la taza. Por si todo esto fuese poco, hay estudios de varias Universidades de prestigio, que han demostrado que el hervir el agua en el microondas, disminuye todos sus nutrientes.
Si calentamos agua y utilizamos una tetera para infusionarlo, es importante, que templemos la misma, con agua caliente, para obtener el resultado óptimo.
¿Por qué es importante el tipo de agua que utilizo?
La base fundamental para poder disfrutar del té en su máxima exprexión, es un buen agua. Más del 95% de nuestra infusión se compone de este bien preciado, que es el agua. Para la preparación del té, debemos siempre emplear un buen agua. Es decir, con la mayor pureza posible. En una situación idílica se trataría de agua, procedente de las altas montañas.
Pero debemos ser realistas, ya que esto no suele ser viable. Pero, si debemos ser conscientes, de evitar el agua “dura”(altos niveles de sales y minerales). Este tipo de agua, va a provocar, una fuerte alteración del sabor en nuestra infusión. Por contra, también debemos evitar el agua destilada o muy baja en minerales, e intentar utilizar agua de un PH neutro y acidez 7 (acidez neutra). En la mayoría de los casos, el agua de uso doméstico es blanda y poco ácida, siendo totalmente válida para su uso. No siendo siempre necesaria la adquisición de agua embotellada. Si es conveniente, que en el grifo de agua corriente, dispongamos de algún filtro, para eliminar las impurezas. O algún tipo de jarra específica para este uso. Las cuales filtran muy bien, tanto los minerales como olores no deseados.
Otra opción, para disminuir estos residuos, consistiría, en disponer de agua hervida previamente, la cual ya haya desprendido buena parte de esos minerales e impurezas. Y recuerda, un mal agua puede estropear el mejor té.
¿Por qué es tan importante el tiempo de infusionado?
Lo primero que debemos saber sobre esto, es que cada té o infusion, tienen unos tiempos de infusionado totalmente dispares. Al igual que nos ocurre con la temperatura, cada té requiere de un tiempo para poder desprender todo su aroma y propiedades. Esto va a variar en función de la familia o blend (mezcla). Las propiedades van siendo liberadas por el té poco a poco.
Primero sus propiedades aromáticas, no por ello debemos pensar que ya ha finalizado el proceso de preparación del té. Según transcurre el tiempo emerge la cafeína, presente en el té y por último, otras propiedades que posee, con ciertos toques amargos. Por ello es tan importante que respetemos los tiempos de infusión. En Serenitea, encontrareis la guía de preparación para cada una de vuestras infusiones en la parte trasera del paquete, y así podais disfrutar de vuestro maravilloso té.
¿Por que figura un tiempo de infusionado variable? Verás que en todos nuestros blends, figuran tiempos de infusionados que oscilan en funcion del tipo de infusión, entre “X” y “X” minutos. Y aunque por supuesto, nunca debemos sobrepasar, ese tiempo máximo, podemos variar en ese rango. Para poder obtener una mayor o menor intensidad y sabor. Así, podrás adecuar tu infusión, a tu propio gusto. Ya por último, es importante que como te hemos dicho nunca sobrepases el tiempo máximo recomendado, para evitar obtener una infusión amarga. Si quieres más sabor, deberás añadir más té.
Como habrás visto, cualquiera de estos tres factores, van a incidir sobre el sabor, aroma y propiedades de nuestra infusión. Aquí os dejamos unas pequeñas pautas para poder elaborar nuestros tés, con la mayor precisión posible si no disponemos de un termómetro. Estos tiempos pueden variar en función del material y grado de disipación del calor del mismo:

Para resumir, debemos respetar el triángulo de la buena preparación, tres factores, que son importantísimos, temperatura, agua y tiempo. Merece la pena tener un filtro para agua, una tetera con infusor, controlar la temperatura y tiempo, y sobre todo, disfruta de un buen té.
Me parece perfecto la guia practica para preparar un buen té, creo que hace la página mejor